Para el hombre:

El dispone de un sólo método de anticoncepción planificada, el preservativo o condón.
Su colocación es muy sencilla, aunque debe ser la adecuada, y sólo requiere unos segundos previos al coito. Lo recomendable es colocarlo previamente a iniciar los sexuales anteriores al acto sexual ya que de esta forma se previene que el líquido pre seminal entre en con la vagina y pueda llegar a producir un embarazo no deseado.

La mayor ventaja de este método, sin lugar a dudas, es la protección que proporciona: no sólo evita el embarazo, sino que también funciona como barrera contra las enfermedades venéreas, es decir, contagiadas por vía sexual.

Para la mujer:

* La Pildora: La píldora anticonceptiva es uno de los métodos más eficaces para prevenir el embarazo, siempre que se tome de manera correcta (todos los días señalados, a la hora precisa).

La píldora combinada de gestágeno y estrógeno se vende, por lo general, en envases de 21 unidades. La primera se toma el primer día de menstruación y después una cada día durante las 20 jornadas siguientes. Cuando se acaban las 21 píldoras se deja una semana de descanso en la que la mujer vuelve a tener el periodo. El siguiente envase se inicia tras estos siete días.

En ciertas marcas de píldora, se incluyen siete pastillas placebo (inactivas) para que la mujer las tome durante la semana de descanso. El objetivo es no perder el hábito de uso de este método anticonceptivo ya que la eficacia del mismo está en relación directa con su consumo regular y planificado.


La minipíldora es similar a la anterior, pero se toma todos los días sin descanso, dado que los sangrados continúan siendo irregulares a pesar de su consumo. Los efectos de esta pastilla comienzan a las tres horas de la toma.

Existe otra variante con la que las menstruaciones se reducen a cuatro al año, ya que la píldora se toma durante tres meses sin interrupción, tras los cuales se realiza una semana de descanso. De momento sólo se comercializa en Estados Unidos, pero su aprobación está pendiente en Europa.

Efectividad aproximada: 95% - 99,9%, dependiendo de que el uso sea perfecto o no.

El Parche: El ciclo es similar al de la píldora anticonceptiva. El parche debe cambiarse cada semana, durante tres semanas consecutivas. Tras este tiempo, la mujer pasa siete días sin ponérselo. En este intervalo, aparece la menstruación.

Los glúteos, el abdomen, la parte superior del torso (a excepción de los senos) y la parte superior y exterior del brazo son los lugares adecuados para colocarlo. Hay que evitar tocar la parte adhesiva con los dedos y conviene presionar durante unos segundos para fijar bien los bordes.

En el caso de que el parche se desprenda, no puede reutilizarse sino que hay que poner otro nuevo.

Efectividad aproximada: 99%, si su uso es perfecto.

Por Inyección: El médico administra a la mujer este anticonceptivo mediante una inyección intramuscular, preferentemente en los glúteos y si no, en la parte superior del brazo. Existen diferencias según el tipo de inyectable empleado:

- Aplicación trimestral: debe administrarse durante los primeros días del período menstrual y repetirse cada tres meses.

- Aplicación mensual: la primera inyección se practica el primer día del ciclo menstrual y las posteriores deben suministrarse en intervalos de 27 días como mínimo y 33 como máximo.

Efectividad aproximada: 99,7%, si su uso es perfecto.

DIU: El médico inserta a la mujer el DIU en la cavidad uterina. El proceso es sencillo, dura sólo unos minutos y puede realizarse con o sin anestesia local.



Es aconsejable que la implantación de este dispositivo tenga lugar durante los últimos días de la menstruación o justo después, de modo que el cuello del útero se encuentre abierto.

La duración habitual del DIU de cobre y hormonal es de cinco años. El DIU inerte está en desuso, ya que las otras dos versiones son más eficaces.

Tras la inserción de un DIU se debe comprobar su correcta colocación mediante una exploración o una ecografía. Deben realizarse controles médicos periódicos, hasta su caducidad.

Efectividad aproximada: 99,7% (DIU de cobre) / 99,9% (DIU liberador de hormonas).

Diafragma: Antes del uso habitual del diafragma, el médico debe adaptarlo al cuerpo de la mujer para asegurar la correcta colocación. A partir de ahí, la usuaria se lo inserta ella misma media hora antes de la relación sexual, cubriéndolo previamente con espermicida.

Debe dejarlo en la vagina por lo menos 6 horas después del coito para que el espermicida actúe y nunca más de 24 horas por riesgo de infecciones.

Pueden practicarse varias relaciones sexuales con el diafragma puesto durante este tiempo, sin necesidad de extraerlo. Algunos ginecólogos recomiendan no sacar el dispositivo para cubrirlo con más espermicida, si se va a continuar su uso, y así evitar la entrada de esperma en el útero.

La duración de este método depende del uso y de los cambios corporales de la mujer, no obstante, es aconsejable desecharlo al año de utilización. Tras su empleo, se limpia cuidadosamente con agua y jabón neutro.

Efectividad aproximada: 80% - 94%, siempre que se use con espermicida.

Píldora del día despues: Este método de anticoncepción se debe aplicar sólo en caso de emergencia. Pueden utilizarlo todas las mujeres, no hay restricciones de edad, siempre que no se haya confirmado que están embarazadas.

Dependiendo del tipo de píldora:

* Formato de dos dosis: dos pastillas de 0,75 miligramos de levonorgestrel administradas con 12 horas de diferencia hasta 72 horas después de la relación sexual.
* Unidosis: dosis única de 1,5 miligramos dentro de las 72 horas tras la relación sexual.

A partir de la toma de la píldora poscoital, la menstruación suele venir en la fecha que la mujer prevé según su ciclo habitual o atrasarse pocos días. Es probable que se produzca un pequeño sangrado antes de que la mujer vuelva a tener la regla con normalidad.